Irán suspende de por vida a un levantador de pesas tras estrechar la mano de un israelí en el podio

Levantador de pesas suspendido de por vida en Irán después de saludar a un atleta israelí

En una medida controvertida, Irán impuso una suspensión de por vida del deporte al levantador de pesas Mostafa Rajaei y disolvió un comité deportivo. La decisión se tomó después de que Rajaei saludara a un homólogo israelí en un podio durante el Campeonato Mundial Master de Halterofilia de 2023 en Polonia.

Rajaei, un levantador de pesas veterano, logró el segundo lugar en su categoría y subió con orgullo al podio con la bandera iraní envuelta a su alrededor. Junto a él estaba Maksim Svirsky de Israel, que terminó tercero. Los dos atletas se dieron la mano e incluso se tomaron una foto juntos, un gesto que ahora ha tenido graves consecuencias para Rajaei.

La Federación Iraní de Halterofilia ha prohibido a Rajaei participar en cualquier deporte por el resto de su vida, calificando sus acciones de transgresión “imperdonable”. La federación afirmó que su posición se alinea con las creencias de la República Islámica de Irán. Además de la prohibición, a Rajaei también se le ha prohibido la entrada a todas las instalaciones deportivas.

Las repercusiones se extendieron más allá de Rajaei, ya que Hamid Salehinia, jefe del equipo de halterofilia, fue destituido de su cargo. La federación también disolvió un comité que representaba a levantadores de pesas veteranos.

El jefe de la Federación, Sajad Anoushiravani, emitió un comunicado pidiendo disculpas al líder de la revolución, a las familias de los mártires y al pueblo de Irán. Prometió que incidentes como este no se repetirían dentro de la familia del levantamiento de pesas.

El incidente en el campeonato de halterofilia tuvo lugar en Cracovia y contó con la participación de más de 1.000 atletas de 47 países. La negativa de Irán a reconocer a Israel como país y su estricta prohibición de cualquier contacto entre atletas iraníes e israelíes es bien conocida dentro de la comunidad deportiva.

Los atletas iraníes han optado sistemáticamente por abstenerse de competir contra los israelíes. Esta postura ha dado lugar a descalificaciones y retiradas de torneos por motivos médicos. El país ha enfrentado críticas y ha recibido prohibiciones debido a su postura intransigente.

Los incidentes notables incluyen la suspensión de cuatro años impuesta a Irán por el organismo rector mundial del judo en 2021. Esta acción se tomó en respuesta a la negativa de Irán a permitir que sus atletas compitan contra israelíes. La presión de las autoridades ha llevado a que varios atletas iraníes deserten y busquen oportunidades en otros lugares.

Un ejemplo es Alireza Firouzja, un prodigio del ajedrez que abandonó Irán después de que la federación deportiva le prohibiera participar en el campeonato mundial de 2019 para evitar enfrentarse potencialmente a un oponente israelí. Firouzja ahora compite bajo bandera francesa.

El incidente que involucra a Rajaei y Svirsky ha puesto de relieve una vez más las estrictas políticas impuestas por Irán en relación con los atletas israelíes. Queda por ver si esta controversia resultará en una reevaluación de estas políticas o en un mayor fortalecimiento de la postura de Irán.